Sabemos muy bien lo que queremos: tener dinero, ser felices, que nuestras relaciones sean armoniosas, hacer carrera, vivir una vida interesante. Lo que nadie tiene tan claro es cómo se consigue todo eso. A menudo las decepciones que la vida nos trae va cargándonos de forma destructiva para nuestro cuerpo hasta el punto que puede acabar generando depresión, estrés, cambios de humor, tristeza, cansancio, desencanto y desmotivación en general.

¿Como descargar estas energías destructivas o "oscuras" de nuestro cuerpo y nuestra mente? Sencillo, llorando. ¿Quien no se ha sentido liberado después de un episodio de llanto intenso? seguramente nadie. El llanto es y siempre ha sido una forma natural de curar nuestra alma pero hemos perdido gran parte del conocimiento ancestral para regular y optimizar los efectos de este llanto. Así que, no lo duden, ¡lloren que es la mejor manera de ser feliz!

Antonio Ortega Gómez
Licenciado en psicoterapia astral.

lunes, 1 de septiembre de 2008

LAS ENDORFINAS Y EL ACTO DE LLORAR

Por todo el mundo es conocido el efecto relajante que genera el llorar. No puede ser de otra manera ya que llorando liberamos una gran cantidad de endorfinas que nos hacen sentir bien.

Las endorfinas actúan como neurotransmisores producidos por el organismo en respuesta a varias situaciones, entre las cuales se encuentra el dolor. En este sentido, puede considerarse que son analgésicos endógenos, puesto que actúan inhibiendo la transmisión del dolor.

En el plano emocional provoca la incentivación de sensaciones de placer, de alegría, de bienestar e incluso de euforia. Modificación de la percepción de las cosas que deja atrás visiones depresivas o tristes en situaciones de interacción con el mundo.

Liberar endorfinas llorando y desahogándonos fue la única forma que conocían nuestros antepasados, y hoy día es la forma más natural y efectiva para sobrellevar el día a día; des de una pena puntual, hasta grandes tragedias e incluso enfermedades mentales que la medicación no resulta efectiva.

LA SABIDURÍA DE LA PLAÑIDERAS EGIPCIAS Y EL PO-YHA

La sabiduría de las plañideras egipcias y el Po-Yha, el Arte de Llorar.

Las plañideras Se las contrataban para llorar en los rituales funerarios y el número de mujeres contratadas estaba directamente relacionado con el poder adquisitivo del difunto. Eran, pues, síntoma de estatus social.

Estas mujeres, profesionales del lloro, podían llorar a su antojo y de una forma próxima al misticismo por lo que se creía que eran capaces de absorber las penas e inquietudes y liberarlos a través de sus cuerpos. La energía negativa generada por la pena y la desesperación puede ser disipada a través del Po-Yha o arte de llorar de los egipcios.

Estas técnicas para provocar el lloro así como aprender a canalizarlo para “limpiar” la energía oscura que generan los problemas del día a día reunidos en un fantástico libro.

Isabel Pacheco Anderson
Doctora en historia antigua por la Universidad de Londres.

ESTRUCTURA DE "EL ARTE DE LLORAR"

Tiene 230 páginas con fotografías y dibujos a todo color y de gran calidad.

- Introducción: El secreto de las Plañideras.
1. El Egipto antiguo
2. ¿Llorar libera endorfinas? La base científica del lloro.
3. La psiquiatría actual y los estudios sobre las endorfinas.

- Primera parte: El Po-Yha.
1. Los canales de energía de nuestros cuerpos: el Sahu, el Khat i el Djet.
2. Las energías llamadas “oscuras”.
3. El arte de llorar y otras culturas: la India y el Japón.

- Segunda parte: Ejercicios específicos según el mal.
1. Ya no siento mal de amores.
2. La depresión: ¿que sucede cuando estoy triste?
3. El Stress y el trabajo: libera endorfinas en 5 minutos.
4. La soledad: aprende a escucharte a ti mismo.
5. La felicidad autentica.

- Tercera parte: Yo, los demás y el equilibrio cósmico.
1. Canalizar el mal de los demás y devolverlo al cosmos.
2. Más allá del arte de llorar.

viernes, 29 de agosto de 2008

NUESTROS LECTORES




Juan García Sánchez, 73 años. Pensionista.
“El libro que ha cambiado mi forma de vivir la vida”.




José Martínez Estrada, 68 años. Pensionista.
“La felicidad es saber reír pero también saber llorar”.



María Antonia Murillo Mata, 85 años. Pensionista.
“Mis nietos me dicen que se me ve mucho mas relajada y guapa. Gracias.”



Maribel Gimeno Ugaz, 34 años. Ama de casa.
“Después de mi divorcio me hundí, visité muchos psicólogos y psiquiatras pero nada curada el vacío de mi alma. Con los ejercicios de “El arte de llorar”, mi hija me dice que he cambiado para bien, ya no siento el pecho oprimido”.


Romina Grau López (Mimi), 43 años. Actriz.
“Soy una mujer nueva, segura de si misma y valiente”.

Pedro Fonseca Mata, 28 años. Abogado.
“Estoy en harmonía con mi lado femenino. Este libro ha cambiado mi vida”.




Ana García Morales, 28 años. Profesora de aeróbic y aquagym.
“Llorando se liberan endorfinas. Un magnifico compañero para el ejercicio físico”.

Noelia Horta Vilar, 19 años. Estudiante de psicología.
“Estoy en plenitud, nunca me había sentido mejor y el dinero que me he ahorrado en psicólogos y pastillas que dañan el karma”.




Fátima Jalaf, 21 años. Estudiante de periodismo.
“Las técnicas me ayudan a estudiar. Si vas descargada a un examen casi seguro que lo apruebas. A mi me funciona”.



Ruth Bonilla y Enrique Cortés, 31 y 32 años respectivamente. Doctora en medicina general y Masajista deportivo.
“Se lo recomiendo a mis pacientes con insomnio, estrés, depresión y cansancio crónico”.



“Sus técnicas milenarias no dejan de sorprenderte por su sencillez y sabiduría. Basándome en este libro doy un curso donde enseño a llorar correctamente para que sus efectos beneficiosos sean mas completos”.