Juan García Sánchez, 73 años. Pensionista.
“El libro que ha cambiado mi forma de vivir la vida”.
José Martínez Estrada, 68 años. Pensionista.
“La felicidad es saber reír pero también saber llorar”.
María Antonia Murillo Mata, 85 años. Pensionista.
“Mis nietos me dicen que se me ve mucho mas relajada y guapa. Gracias.”
Maribel Gimeno Ugaz, 34 años. Ama de casa.
“Después de mi divorcio me hundí, visité muchos psicólogos y psiquiatras pero nada curada el vacío de mi alma. Con los ejercicios de “El arte de llorar”, mi hija me dice que he cambiado para bien, ya no siento el pecho oprimido”.
Romina Grau López (Mimi), 43 años. Actriz.
“Soy una mujer nueva, segura de si misma y valiente”.
Pedro Fonseca Mata, 28 años. Abogado.
“Estoy en harmonía con mi lado femenino. Este libro ha cambiado mi vida”.
Ana García Morales, 28 años. Profesora de aeróbic y aquagym.
“Llorando se liberan endorfinas. Un magnifico compañero para el ejercicio físico”.
Noelia Horta Vilar, 19 años. Estudiante de psicología.
“Estoy en plenitud, nunca me había sentido mejor y el dinero que me he ahorrado en psicólogos y pastillas que dañan el karma”.
Fátima Jalaf, 21 años. Estudiante de periodismo.
“Las técnicas me ayudan a estudiar. Si vas descargada a un examen casi seguro que lo apruebas. A mi me funciona”.
Ruth Bonilla y Enrique Cortés, 31 y 32 años respectivamente. Doctora en medicina general y Masajista deportivo.
“Se lo recomiendo a mis pacientes con insomnio, estrés, depresión y cansancio crónico”.
“Sus técnicas milenarias no dejan de sorprenderte por su sencillez y sabiduría. Basándome en este libro doy un curso donde enseño a llorar correctamente para que sus efectos beneficiosos sean mas completos”.